Lluis Mallart

El antropólogo Lluis Mallart llegó a Camerún en 1961 como misionero y fundador del movimiento Agermanament. Allí descubrió su vocación de investigador junto a los Evuzoks, etnia africana a la que dedicaría su vida.En esta entrevista nos narra su experiencia y visión de las misiones, así como su compromiso e ilusión por seguir acercándonos la cultura de este pueblo.
SUMARIO:
  • Bloque 1. Presentación
    Infancia y familia. Estudios de comercio y trabajo como comerciante. Estudios de Filosofía y Teología en el seminario de los jesuitas.
  • Bloque 2. La misión “Agermanament” en Camerún
    Regreso a Barcelona. Creación del grupo “Negritud” y del movimiento de colaboración con la iglesia en África “Agermanament”. Llegada a Camerún. Estancia con los Evuzok. La poligamia. Visión colonialista de la iglesia y las misiones. Conoce a su futura esposa.
  • Bloque 3. Estudios e investigación como antropólogo
    De misionero a antropólogo. Abandono de la misión en 1968. Estudios de antropología en Francia y doctorado sobre “magia y brujería”. Docencia en la Universidad de Nanterre. Docencia en Postgrado de Estudios Africanos de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona. Estudios sobre la literatura africana.
  • Bloque 4. Regreso a Camerún y reflexión sobre el desarrollo del país en los últimos años
    Regreso a Camerún con su familia: retomar estudios sobre los evuzok. Reflexiones sobre el desarrollo del país. La visión colonialista de algunas ONGs. El poder en África.
  • Bloque 5. Cuestionario
    Valores. Un sonido. Una comida favorita. Un lugar. Lo que no ha podido conseguir. Lo que sí ha podido conseguir. Una huella de su trabajo. El recuerdo de una persona. Un deseo.
Otras Historias

Miguel María Larburu

Algeria
«Al final, relativizas tu cultura y dejas de considerarla superior a nada»

José Luis Bandrés

«Etiopía es un gran ejemplo de convivencia interétnica»

Arístides Holgado

Mozambique
«La lucha de religiones me parece de lo más absurdo»

Bernarda García

Costa de Marfil | Mali | Togo
«Muchas veces los golpes de Estado están manipulados por las grandes potencias»